Cuánto da de sí viajar tanto. En cuanto a comidas o picoteo se refiere, una descubre comidas o preparaciones típicas de la zona que, como poco, asombran.
Me encanta la comida regional y tradicional.
Todo empezó en la autopista, cerca de Monesterio (Badajoz), donde paramos habitualmente camino de mi pueblo.
En una de esas paradas probé la cachuela que no conocía en absoluto y me encantó, tanto su sabor como textura.
Así pues me propuse hacerla, ya que en Ayamonte conseguía fácilmente el hígado de cerdo ibérico, esencial para una magnífica cachuela.
¡Espectacular!
* 500 gramos de hígado de cerdo ibérico. Se puede envasar en bote de cristal, colocar la tapa de rosca y meter en nevera. Se obtiene en total 720 mililitros de cachuela, para 4 tarros de 180 mililitros. La manteca colorada se mantiene por encima de la cachuela que le sirve de protección. Me he guiado por la receta de la zurrapa de cerdo y los ingredientes de un envase que compré en Monesterio (Badajoz)Ingredientes
* 500 gramos de manteca blanca de cerdo ibérico.
* Aceite de oliva virgen.
* 6 dientes de ajo.
* 2 hojas de laurel.
* Un poco de pimienta negra molida (opcional).
* 1/2 cucharadita de comino molido.
* 14 gramos de sal gorda.
* 16 gramos de pimentón agridulce de La Vera.Modo de preparación
1. Pelar y laminar los dientes de ajo.
2. En una cacerola grande calentar 100 gramos de la manteca ibérica a fuego muy bajo hasta que quede completamente transparente.
3. Echar los ajos laminados.
4. No debe hervir demasiado, por lo que hay que mantenerlo a fuego muy bajo.
5. Cocer hasta que estén tiernos.
Como tardará bastante rato, mientras tanto preparar el resto:
6. Picar con un cuchillo o tijeras el hígado ibérico lo más fino posible.
7. En una sartén con un poco de aceite saltear el hígado picado, removiendo constantemente durante pocos minutos hasta que desparezca el color rojizo del hígado en la mayoría de los trozos, SIN freír demasiado, basta que adquiera ligero color beige:
8. Reservar hasta que los ajos de la cacerola estén blanditos.
Cuando los ajos estén tiernos:
9. Añadir a la cacerola grande el resto de la manteca (400 gramos), el hígado salteado, comino, sal, pimienta negra (opcional) y laurel.
10. Cocer 40 minutos a fuego muy bajo (2 sobre 9) removiendo despacio constantemente.
Las láminas de ajo se habrán deshecho en la mezcla.
11. Sacar las hojas de laurel y desechar.
12. Sacar y escurrir todos los trocitos de hígado.
13. Triturarlos hasta formar una pasta más o menos homogénea.
Si quedasen trocitos muy pequeños no pasa nada, queda mejor.
14. Volver a echar el hígado triturado en la cacerola con la manteca.
15. Remover bien hasta homogeneizar la mezcla.
16. Sacar un poco de la mezcla, unos 2 cucharones y añadir el pimentón de la Vera.
17. Remover bien.
18. Volver a echar en la cacerola grande esta mezcla con el pimentón, hasta homogeneizar toda la cachuela.
19. Cocer 5 minutos, no más.
20. Comprobar que la manteca cubre un poco por encima la masa de la cachuela.
21. Reposar un rato.
22. Envasar y dar unos golpecitos al frasco contra la mesa para que la cachuela asiente por debajo de la manteca.
23. Esperar a que enfríe, destapado.
Conservar siempre en nevera bien tapado.Observaciones