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Sopa de picadillo

Por Azulpurpura

Para una cena ligera, sana, digestiva, muy rica y además de rápida preparación.

Todo ventajas.

Sopa de picadillo

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Número de personas: 4 Tiempo de preparación: Dificultad:
Temporada : Invierno, mejor
Procedencia : Azulpúrpura
Valoración 5.0/5
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Ingredientes

* 1 litro de caldo de puchero o cocido.
* Jamón serrano.
* Pollo del puchero o cocido.
* Carne de puchero o cocido.
* Huevo duro.
* 1 o 2 hojitas de hierbabuena.
* 200 gramos, aproximadamente, de arroz redondo.

Modo de preparación

Como ya comenté en la receta del puchero, suelo hacer cantidad de caldo para luego congelarlo y así tener resuelta una cena como ésta.

Igual hago con el pollo y carne, suelo echar cantidad al puchero para luego congelar parte del mismo y utilizarlo en esta receta y también para hacer la "pringá".
Esta sopa de picadillo con arroz es muy reconfortante, sobre todo en invierno.

Normalmente congelo el caldo muy concentrado, así abulta menos en el envase que irá al congelador, y cuando voy a utilizarlo le añado más agua, pruebo y sazono si es necesario y cuezo el arroz tal como indico mas abajo.
No pongo cantidad de jamón serrano ni pollo ni carne pues va en gustos poner mas o menos cantidad a la sopa.

Cada cual se sirve como guste.

1. Picar el jamón serrano, la carne y el pollo cocido en trocitos pequeños.
2. Pelar y picar el huevo duro.
Reservarlos.
3. Echar el caldo en una cacerola y calentar a fuego fuerte, probar y sazonar si fuese necesario, tiene que quedar sabroso
4. En cuanto empiece a hervir echar el arroz, remover, bajar el fuego un poco y dejar cocer 15 minutos, probar y si el arroz aun está algo entero apagar y dejar que se termine de hacer.
Es el momento de echarle una o dos hojas de hierbabuena, para que infusione hasta el momento de servir.
Vigilar todo el rato no se pase el punto del arroz.
5. Presentar en cuencos: el jamón serrano, carne, huevo duro y pollo, muy picados
6. Servir la sopa de arroz.

 

 

Cada cual se echa en su cuenco o plato hondo la cantidad de picadillo que mas guste.
En la feria de Sevilla toman el caldo (sin arroz ni fideo ni picadillos, claro!) servido en vaso, con su hierbabuena dentro y bien calentito, ya avanzada la madrugada  para contrarestar el alcohol de las copitas de fino y cubatas de más.

La verdad que un caldo como éste entona el cuerpo para continuar con la juerga, que aún queda tiempo para cuando llegue el chocolate con churros. 
En casa, se puede servir el caldo en vasitos pequeños cuando hay reunión de amigos tomando un picoteo.

 

 

 

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